Además de ser un regulador metabólico, la avena ayuda a disminuir los niveles de glucosa en la sangre, convirtiéndose en el mejor cereal para prevenir la diabetes.
Incluir los brotes y germinados en la ingesta diaria hará que nuestro cuerpo funcione como un relojito, y se reflejará en sentirnos energéticos y fuertes.