Enchiladas de pavo ahumado
Aprovecha los alimentos que sobraron de las fiestas decemrbinas y prepara estas deliciosas enchiladas de pavo ahumado; dale un giro a esta proteína con esta receta fácil
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Receta fácil de enchiladas de pavo ahumado del recalentado
Freepik
Ingredientes
- 12 tortillas de maíz
- 3 tazas de pavo ahumado deshebrado
- 2 tazas de queso manchego rallado
- 1/4 de taza de crema
- 1/4 de taza de cebolla picada
- 2 cucharadas de cilantro picado
- Sal y pimienta al gusto
- 4 chiles guajillo
- 2 chiles ancho
- 2 chiles chipotle
- 2 jitomates
- 2 dientes de ajo
- 1/4 de cebolla
- 2 cucharadas de aceite
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
- Para la salsa, limpia y desvena los chiles. Ponlos a cocer en una olla con agua junto con los jitomates, el ajo y la cebolla hasta que estén suaves. Escurre y licúa con un dos tazas del agua en la que hirvieron. Cuela y reserva.
- Calienta el aceite en una cacerola y fríe la salsa a fuego medio, moviendo de vez en cuando, hasta que se reduzca y espese. Sazona con sal y pimienta al gusto.
- En un tazón, mezcla el pavo con la mitad del queso, la crema, la cebolla, el cilantro, sal y pimienta. Reserva.
- Calienta una sartén a fuego medio y pasa las tortillas por la salsa, una por una, para que se suavicen. Rellénalas con la mezcla de pavo y dóblalas por la mitad.
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Espolvorea queso y sirve las enchiladas con una ensalada verde o el acompañamiento de tu preferencia. Disfruta de este delicioso platillo con el recalentado.
Una forma de aprovechar el pavo ahumado que sobró de las fiestas decembrinas es hacer en otras presentaciones, es decir, cocinarlo de maneras diferentes, por ejemplo, la carne que sobró la puedes usar para preparar enchiladas de pavo ahumado.
Cómo hacer que las enchiladas de pavo ahumado queden perfectas
Si quieres lucirte con la familia y amigos con el recalentado y darle un giro distinto y delicioso a la comida que sobró, entonces checa estos tips para que las enchiladas de pavo ahumado queden exquisitas.
Calienta las tortillas antes de rellenarlas. Esto evitará que se rompan o se endurezcan al enrollarlas o doblarlas. Puedes calentarlas en un comal o freírlas ligeramente con poco aceite.
Calienta el relleno justo antes de servir. Así evitarás que las enchiladas tengan partes frías o heladas, sobre todo si usas sobras de otros días. Puedes calentar el relleno en una sartén con un poco de mantequilla o aceite.
Haz una salsa consistente y sabrosa. La salsa es el alma de las enchiladas, así que debe tener una textura suave, sin exceso de líquido, y un sabor equilibrado de acidez, sal y picor. Puedes agregar una cucharadita de bicarbonato a los tomates verdes mientras hierven para reducir la acidez, y dejar hervir la salsa hasta que se reduzca y espese.
Usa queso que se derrita bien. El queso le da un toque cremoso y delicioso a las enchiladas, pero debes elegir uno que se funda fácilmente y que no se queme o se seque al hornear. Algunas opciones son el queso manchego, el queso Oaxaca, el queso chihuahua o el queso asadero.
Decora con ingredientes frescos y coloridos. Las enchiladas se ven más apetitosas y bonitas si las adornas con ingredientes que contrasten con la salsa y el queso. Puedes usar crema, cebolla morada, aguacate, cilantro, lechuga, rábanos, granada o lo que más te guste.
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