El café con leche es una de esas combinaciones que nunca pasan de moda. Ya sea en el desayuno, para arrancar el día con energía, o a media tarde como un momento de pausa, esta bebida se ha vuelto un clásico en muchas casas.
Crujientes, coloridas y llenas de sabor, estas botanas son fáciles de preparar y se conservan muy bien para llevar en la lonchera este regreso a clases.