Agua de avena con melón: una opción refrescante para los días de calor
-
Tiempo:0:20
-
Porciones:4
-
Dificultad:Baja
-
Tipo:
-
Cocina:
La refrescante agua de avena y melón
Bing IA
Ingredientes
- 1 taza de avena integral
- 1 melón mediano, pelado y sin semillas
- 4 tazas de agua
- Miel o azúcar al gusto
- Hielo al gusto
Preparación
-
Coloca la avena en un tazón y cúbrela con 2 tazas de agua. Deja reposar durante al menos 30 minutos.
- Corta el melón en cubos y licúalo hasta obtener un puré suave.
-
Escurre el agua de la avena y colócala en la licuadora con el puré de melón. Añade las 2 tazas de agua restantes y mezcla hasta que todo esté bien integrado.
-
Si deseas, añade miel o azúcar al gusto y mezcla nuevamente.
- Sirve el agua de avena y melón en vasos con hielo al gusto.
Las intensas temperaturas hacen que se te antoje probar una bebida refrescante como el agua de avena y melón para sentir que el calor es menos intenso y también para hidratar el cuerpo, que en esta temporada es fundamental ingerir líquidos para que el cuerpo se mantenga sano.
El agua de avena y melón es una bebida excelente para combatir el intenso calor, ya que sus ingredientes contienen muchos nutrientes y además, la clase está en ponerle muchos hielos para que sea un agua fresca ideal para la temporada de calor extremo.
¿Para qué sirve el agua de avena y melón?
El agua de avena y melón combina dos ingredientes que son muy poderosos en cuánto a nutrientes se refiere, ya que ambos elementos son conocidos por sus propiedades benéficas para el cuerpo.
Por ejemplo, la avena es conocida por su alto contenido en fibra, la cual ayuda a la salud intestinal, a que el tránsito intestinal sea mejor y por lo tanto a prevenir el estreñimiento.
La fibra también contribuye a mantener el corazón sano. Ayuda a regular la presión arterial y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
La avena es hipocolesterolemiante, lo que significa que ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre. Su fibra soluble, llamada beta-glucano, se une al colesterol y lo elimina del cuerpo.
Consumir avena en el desayuno proporciona sensación de saciedad, lo que puede ayudar a controlar el apetito y evitar el exceso de calorías durante el día.
Por su parte, el melón es excelente para hidratar, ya que su composición es 90 por ciento agua, además es una excelente opción para quienes buscan perder peso, ya que es bajo en calorías y grasa. Además, su capacidad para dar sensación de llenura ayuda a controlar el apetito.
Gracias a las vitaminas E y C presentes en el melón, esta fruta ayuda a extender la vida útil de nuestras células, disminuyendo el deterioro y reduciendo las probabilidades de enfermedades degenerativas.
Otras recetas de aguas frescas
