Cómo hacer lasaña de pollo en salsa blanca

Dale un giro a la tradicional receta de lasaña; esta opción con pollo y salsa blanca, en lugar de roja, será tu favorita para eventos especiales o cenas románticas

  • Facebook
  • Twitter
  • Print
  • Email

Lasaña de pollo con salsa blanca

Freepik

Ingredientes

  • 10 hojas de pasta para lasaña pre cocida
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • ½ taza de harina de trigo
  • 2 latas de Leche Evaporada
  • 2 tazas de agua
  • 2 Cubitos de consomé de pollo
  • 5 tazas de pollo cocido y deshebrado
  • Queso Mozzarella rallado

Preparación

  1. En una olla agreda la mantequilla hasta que se derrita y enseguida añade la harina y deja que todo se cocine durante cinco minutos.
  2. Después agrega la leche evaporada, los cubos de caldo de pollo y mezcla muy bien. Deja que todo se cocine hasta que se forme una salsa espesa.
  3. En un molde para hornear pon una hoja de pasta, una capa de salsa blanca, una capa de pollo y una capa de queso y repite el proceso hasta que se llene el recipiente. En la última capa agrega mucho queso mozzarella.
  4. Precalienta el horno a 200° y luego mete la lasaña de pollo en salsa blanca para que se cocine durante media hora o hasta que el queso este derretido. Sácala del horno y está lista para servir y disfrutarla con una copa de vino blanco.

La lasaña es una de las pastas más famosas a nivel mundial, tiene muchas versiones, pero la tradicional es la de carne molida de res con salsa de tomate. Para que les des un giro distinto de sabor a la receta aquí te dejamos una opción con pollo y salsa blanca, se convertirá en tu favorita.

¿Cuál es el origen de la lasaña?

La lasaña se originó en la antigua Grecia y es que a la pasta le llamaban “lasanon”, pero los romanos no se quedaron atrás y llamaron al plato “lasanum”.

Sin embargo, los primeros registros que se tienen de este platillo son de Roma por el gastrónomo Apicio.

Durante la Edad Media, la lasaña se desarrolló en Italia, especialmente en la región de Emilia-Romaña y en esa época los escritores hicieron referencia a este platillo delicioso en sus textos.

Con la expansión del Imperio Romano, la lasaña se difundió por toda Europa y para el 1390 aparece la primera referencia a este platillo en un libro de cocina de Inglaterra y posteriormente la receta llegó a varias partes del mundo.

Hoy en día, la lasaña se ha internacionalizado, con variaciones regionales en su preparación e ingredientes, hay con pollo, con carne, con verduras, en fin para todos los gustos.

La lasaña también parte del patrimonio cultural de varios países, celebrando la fusión de tradiciones culinarias a lo largo de los siglos.

¿Cuántos tipos de lasaña hay?

Existen muchas variedades de lasaña, pues cada país tiene su propia versión y cada vez surgen más, pero aquí te dejamos algunas de las más populares.

  • Boloñesa: la clásica, con capas de pasta, salsa boloñesa (carne y tomate), y bechamel.
  • Verduras: ideal para vegetarianos, rellena de espinacas, calabacín, berenjenas, y más.
  • Mariscos: con camarones, calamares, y otros frutos del mar, usualmente con salsa blanca.
  • Pollo: con pollo desmenuzado o en trozos, a menudo con champiñones o espinacas.
  • Queso: varias clases de queso, como ricotta, mozzarella, y parmesano, a veces con espinacas.
  • Setas: con una variedad de setas y a menudo con una salsa cremosa.
  • Mexicana: con un toque picante, puede incluir jalapeños, carne molida, y frijoles.
  • Atún: una opción más ligera con atún en lata y a veces con aceitunas y huevo duro.

Más recetas de lasaña

  • Facebook
  • Twitter
  • Print
  • Email
Contenido relacionado