Los chiles frescos y secos son básicos en las recetas de la cocina mexicana. Para que los platillos queden exquisitos y podamos aprovechar su sabor, todo el proceso de su preparación es muy importante, ¡desde cortarlos hasta integrarlos en la comida!
Por eso, hoy te queremos compartir los errores más comunes al cortar chiles. Toma nota para que los prepares como profesional de principio a fin.
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Chiles frescos y secos: evita estos errores al prepararlos
COCINAR SIN GUANTES
En primer lugar, debes saber que todos los chiles, en diferente proporción, contienen capsaicina, una sustancia que penetra fácilmente en la piel y que puede irritarla y provocar ardor.
Hay guantes especiales de cocina que te pueden servir para proteger tus manos durante todo el proceso de preparación. Te recomendamos usarlos.
NO QUEMARLOS
Los chiles necesitan tatemarse para que se pueda retirar la piel fácilmente. De no hacerlo, podrías tardar más tiempo del que imaginas. Además, tatemar intensificará el sabor de los chiles, así que te recomendamos hacerlo ampliamente.
NO DEJARLOS SUDAR
Después del tatemado, es de suma importancia meterlos en una bolsa de plástico, mínimo, unos 15 minutos, así se desprenderá la piel más rápido. D
ebes tener paciencia y dejarlos dentro el tiempo necesario para hacer el proceso de forma correcta.
PELLIZCAR LOS CHILES
Al desprender la piel, por desesperación, pellizcamos la piel, haciendo que el chile se rompa.
Es preferible que queden unos pedacitos de piel a que quede todo limpio. Esto no afectará tu platillo.
CORTAR DE EXTREMO A EXTREMO
Cuando vayas a cortar, coloca el chile sobre una tabla de picar, cuidando que el rabo quede hacia arriba.
Corta con la punta de un cuchillo de arriba hacia abajo dejando dos centímetros en la parte de arriba y un centímetro en la de abajo. Si cortas todo, te será difícil rellenarlo, si es que es tu objetivo.
DESVENA CON CUIDADO
Necesitas mucha delicadeza y cuidado al desvenar chiles, o si no, podrían romperse (y a estas alturas ya no te conviene que se rompan).
MOJARLOS
Hay personas que ponen los chiles bajo un chorro de agua para retirar las últimas semillas del chile, pero esto provoca que pierdan su sabor.
Lo mejor es usar una servilleta de papel húmeda para retirar las semillas restantes.
NO LIMPIAR
Finalmente, antes de rellenar y/o capear, vuelve a limpiarlo y continúa el proceso, de lo contrario, se reblandecen, pierden textura y su buena apariencia.
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