Tu cocina es más que un espacio cotidiano: es el corazón del hogar. Según el Feng Shui, armonizar este espacio puede transformar tu cocina en un sitio lleno de energía positiva que favorezca la abundancia y la calma en tu casa.
El corazón de tu cocina: la estufa
En Feng Shui, la estufa simboliza prosperidad y nutrición. Por ello es importante evitar colocarla frente a una ventana o alineada con la puerta de entrada, ya que esto puede ocasionar que la buena energía se escape. Es recomendable ubicarla junto a una pared firme y orientada hacia el Sur, Sureste o Este, direcciones asociadas a la estabilidad y el fuego.
El equilibrio de los elementos
Es muy importante cuidar que la estufa y el fregadero no estén demasiado cerca, pues fuego y agua son elementos que chocan y desequilibran la energía. En buen equilibrio entre el agua y el fuego hará de tu cocina un lugar pacífico y libre de conflicto.
Deja que tu cocina fluya
Una cocina libre de desorden favorece el flujo de chi. Por este motivo es importante deshacerse de los implementos rotos, o bien repararlos, para evitar que el dolor inunde la cocina. También es recomendable no dejar platos sucios a la vista y mantener los cuchillos guardados en cajones para evitar la energía cortante del metal expuesto.
Color, luz y plantas
La luz natural abundante fomenta una energía vibrante y cálida. Si tu cocina no recibe mucha luz, puedes compensar con algo de iluminación artificial cálida para mantener el espacio animado y acogedor. En cuanto a la pintura, opta por colores suaves, como los tonos pastel, que transmiten estabilidad y serenidad. Para el Feng Shui, el exceso de blanco crea un desequilibrio al llenar un espacio de energía fría. Para completar este abrazo espiritual, se recomienda colocar hierbas aromáticas como el romero y la albahaca, que además te ayudarán a la hora de cocinar.