¿Te gustaría ahorrar tiempo cocinando sólo una vez a la semana? El meal prep es una tendencia que puede parecer fácil, pero también trae riesgos. Éstas son las precauciones que debes tomar al hacer meal prep.
1. Cuidado al descongelar
Comprar alimentos congelados es muy práctico, pero hay que tener cuidado a la hora de descongelarlos. Dejarlos a la intemperie puede favorecer el crecimiento de bacterias como la E.coli, causante de malestar intestinal. Se recomienda descongelar la comida en el refrigerador o en recipientes de agua fría, cambiándola cada 30 minutos. Descongelar en microondas tampoco es ideal, a menos que planees consumir los alimentos de inmediato.
2. Evita la contaminación cruzada
Usar la misma tabla para cortar carne y verduras es una práctica peligrosa, pues favorece la contaminación cruzada. Si quieres evitar que los microorganismos de la carne salten a los alimentos frescos, usa tablas separadas y lava muy bien cada utensilio luego de usarlo.
3. Usa el refrigerador responsablemente
Dejar la comida al aire libre la vuelve peligrosa. Para almacenarla, es recomendable guardarla en el refrigerador, dentro de recipientes limpios y herméticos. Para garantizar la conservación de tu comida, tu refrigerador debe estar siempre por debajo de 5 °C. Los alimentos crudos nunca deben colocarse en las repisas superiores, pues pueden gotear sobre la comida preparada, contaminándola.
4. Una buena cocción.
Contrario a lo que creemos, la textura y el color no son indicadores confiables de que la comida se ha cocido. La única manera segura de saberlo es midiendo su temperatura. Por este motivo es indispensable que cuentes con un termómetro en tu cocina.
El meal prep puede convertir tu semana en un paseo breve por la cocina con menos estrés y más nutrientes. Pero como en cualquier plan, los detalles marcan la diferencia. Descongelar mal, no cocinar bien, mezclar utensilios sin lavar o almacenar sin cuidado pueden convertir tu ahorro de tiempo en los malestares que podrían arruinar tu semana.